Y ¿alguien de ustedes se creyó esa de que la reforma de 2007 regulaba la “guerra sucia” y ya no existiría nunca jamás de los jamases? probablemente muchos si, pero en este país, bien me decía un maestro experto en el sistema político mexicano, la ley está para pasárnosla por todos los lados del cuerpo, menos por el del cumplimiento.
Tenía pensado este texto desde hace tiempo cuando aquí en Jalisco apareció una cabeza de perro fuera de la casa del jefe de campaña de un candidato, ahí supe que la guerra volvía más sucia que nunca, pero por esto y por el otro no la escribí en ese momento, hoy que el repunte de AMLO es evidente a todos ojos y la guerra sucia vuelve contra él, no puedo ahorrarme mis palabras en contra de esta practica antidemocrática.
Y empiezo dándoles mi definición de guerra sucia, porque hoy en día todo es acusado por guerra sucia, hasta quejarse de la guerra resultó ser guerra sucia, así se las gastan pues. Entonces para mí, guerra sucia es: atacar directamente sin fundamentos con palabras que claramente desinforman a la gente, desalientan y buscan claramente bajar la popularidad de algún candidato, la guerra sucia no viene sólo de los otros partidos, sino de los medios y periodistas también, al publicar información que ataque directamente a un candidato, lo vincule con personas no deseadas o invente información de cargos publico anteriores del candidato, no digo que no se diga la verdad, digo que si se va a decir o demandar una información de ese rango, mínimo que se fundamente. La guerra se manifiesta en spots televisivos, en ataques en las calles, en volantes falsos, con encuestas manipuladas, con declaraciones en contra, con demandas falsas y hasta con fotos en las redes sociales.
Y es que esto nunca se va acabar, la desacreditación a los candidatos no deseados va a seguir existiendo hasta que este sistema electoral muera, sí, les afirmo con pruebas actuales que sí, al PAN le encantó el producto de la guerra sucia contra AMLO y que sí, el PRI la aprendió muy bien y es un ejemplo a seguir. El reciente spot manipulado con todas sus letras en contra de AMLO en verdad es una ofensa contra el intelecto de los mexicanos, cortar un video y manipular el discurso de una persona para desinformar y engañar al electorado es una de las bajezas, imponer el miedo mediante datos falsos y comparaciones con ogros tenebrosos es de vergüenza, leí hace unos días en El Informador, un artículo de Javier Hurtado que llamaba a Enrique Alfaro el Hitler de Jalisco, del coraje pasé a la risa en unos cuantos segundos.
Y no, no es porque yo vaya a votar o esté a favor de leso candidatos de izquierda, no es cuestión de ideologías, es cuestión de un principio fundamental: el de la libertad, el del derecho a la información, el del derecho a votar y a elegir libremente, bajo esos ataques ustedes creen que ahora el voto es libre y secreto, y hablando del slogan del IFE, no pregunten dónde esta esa institución porque para mí desde 2006 perdió toda credibilidad, no le pidamos a ella que regule la guerra sucia ni tengo esperanza que el ejecutivo o el judicial actúen, mi única esperanza está depositada en nosotros, los mexicanos y en nuestra capacidad de informarnos a favor de una elección más cercana a la realidad, a nuestra realidad. Les digo, la guerra sucia es la peor de las bajezas, pero es peor la nuestra en creernos todo lo que nos dicen.